LA ARQUITECTURA LAMINAR. La disciplina de la delgadez.

La arquitectura laminar surge en paralelo al Movimiento Moderno y al desarrollo de la tecnología del hormigón armado a partir de los años 20 del siglo pasado. Esta nueva arquitectura se caracteriza por su esbeltez, disciplinada delgadez, y por un profundo estudio del cálculo estructural; para obtener la mejor solución aunando estética y estática (forma y estabilidad).

Su propuesta formal, se aleja de la geometría prismática y ortogonal del movimiento moderno y de su máxima “la forma sigue a la función”. En el caso que nos ocupa, “la forma sigue a la estructura”, es decir, la estructura del edificio cobra un gran protagonismo al ser la generadora del espacio y la envolvente; y deja atrás su papel de ser solo un elemento subsidiario de soporte.

Esta interesante, experimental y novedosa forma de proyectar, da lugar a arquitecturas genuinas y expresivas, incluso llegan a despertar la emoción de quienes la contemplan por la superación al reto de la gravedad y la diafanidad de sus espacios.

Este expresionismo estructural tiene su apogeo en la década de los 50 y 60 tanto en Europa como en América. También en Canarias, se realizaron piezas con este lenguaje basado en la geometría del paraboloide hiperbólico y el paraguas invertido, con interesantes resultados.

Centro Atlántico de Arte moderno. 25-09-2020.

Enlace: https://www.caam.net/es/bcd_clasicos.php?n=4181